@jimegol20
Cuando era una adolescente, Victoria Jesús Xipolitakis soñaba con ser famosa, pero las repetidas negativas que recibía en los castings que se presentaba pusieron a prueba su confianza. Con perseverancia y una enorme cuota de carisma, la oriunda de Lanús obtuvo su primera contratación como modelo cuando estaba a punto de cumplir los 18 años. Un trabajo le siguió al otro y Vicky alcanzó lo que tanto deseaba, al menos hasta ese momento porque años más tarde y tras hacerse un nombre en el medio, cumplió otro de sus sueños: ser la vedette principal en una obra en la calle Corrientes. Para ese entonces, los cambios estéticos en su figura y su rostro ya daban que hablar.
Aunque muchos la subestiman, la mediática nunca se achicó. Con un libro publicado, decenas de protagónicos en teatro de revista, un millón y medio de seguidores en Instagram y un lugar en las instancias finales del reality del momento, “MasterChef Celebrity”, Vicky dejó en claro que es mucho más que una chica voluptuosa.
BELLEZA GRIEGA
Victoria desembarcó en la televisión argentina en 2006, como parte de una dupla con su hermana Stefanía en el programa “Palermo Hollywood Hotel” de Canal 9. En pantalla se hacían llamar las “urracas griegas” y afirmaban ser mellizas aunque un tiempo después reconocieron que se llevaban más de un año de diferencia.
El dúo de morochas captó la atención del público con sus ocurrencias y un look con sello propio que escapaba a la clásica fórmula que presentaba la televisión argentina. Mechas, vinchas, bronceado de cama solar y un vestuario ultra hot.
Ya en aquel entonces Victoria sobresalía por su humor y un nivel de inocencia – o ignorancia- que ponía a reír a cualquiera. Personaje o no, Xipolitakis comenzaba a entender cómo explotar su atractivo.
LA VEDETTE
Los años “con plumas” comenzaron gracias a participaciones secundarias en “Celebra la risa” y “Trastornados” para luego formar parte de “Barbierísima” y “Escandalosas“. En 2014, se convirtió en la primera vedette de “Brillantísima” y fue convocada al “Bailando por un sueño”, donde explotó su capacidad para el juego mediático.
LA NUEVA VICKY
Son muchos los famosos que deciden pasar por el quirófano para un retoque estético, sin embargo Vicky lo llevó un paso más allá. Las reiteradas cirugías y tratamientos invasivos a los que se expuso modificaron su rostro al punto que se hace difícil reconocer a aquella simpática “urraca” que solía ser.
El cambio de color de pelo fue un detalle mínimo comparado con los retoques que le siguieron. Xipolitakis se aplica bótox desde hace años, se operó los pechos y la nariz, realizó un tratamiento de plasma para su cola, se colocó carillas dentales. Su obsesión por la imagen también la llevó a someterse a una liposucción, un cambio que generó polémica. “Me sacaron tres litros de grasa de la pancita”, relató en su momento.
MASTERCHEF CELEBRITY
A pesar de que pocos apostaban por su duración en el reality, Victoria alcanzó las instancias finales del certamen. Según afirmó la ex vedette, su habilidad para la cocina mejoró muchísimo al convertirse en mamá de Salvador Uriel hace dos años, y así lo demostró en cada episodio. Una vez más, nos convence que su lugar en los medios no es casualidad sino un resultado de su esfuerzo.
Por J.G.
