El ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, en diálogo con Canal 9 de Comodoro Rivadavia, afirmó que se están «más de 20.000 millones de pesos en la fabricación de computadoras en Argentina, que son 633.000 netbooks».
El ministro ratificó que la presencialidad en las escuelas debe ser analizada de acuerdo a «la realidad de cada una de las ciudades de la Argentina», en términos epidemiológicos.
Más netbooks del Estado
Trotta resaltó la inversión de 20.000 millones de pesos en la fabricación de 633.000 netbooks, a razón de $31.600 por unidad, «estamos ampliando la inversión en lo que resta del año para proyectar más de 1 millón de computadoras a lo largo del 2021 y el comienzo de 2022 con ocho empresas argentinas que hemos vuelto a poner en funcionamiento a partir de esta inversión del Estado.
En la misma línea, recalcó: «No hay soluciones mágicas, lo que sí tiene que haber es un horizonte que haga reflexionar a toda la dirigencia social y política de la trascendencia de la inversión prioritaria en el campo educativo».
Unidad pedagógica
En relación al trabajo de los equipos técnicos para la readecuación de contenidos, considerando los meses de clase perdidos desde el inicio de la pandemia, el Ministro de Educación manifestó: «El impacto económico, social y educativo es fuerte en un país que venía atravesando problemas fuertes antes de la pandemia. El concepto de Unidad Pedagógica 2021 implica que tomamos ambos años como una unidad pedagógica, porque aquellos aprendizajes que no lograron transitarse en el excepcional 2020 no los dimos por aprendimos, no se reorganizó la propuesta pedagógica. Y eso lo conversábamos en el Consejo Federal, ya que tenemos que garantizar cada uno de los aprendizajes de cara al 2022, y ver cómo acompañamos a aquellas trayectorias educativas más impactadas».
Nueva normalidad
«Incluso, en este 2021, no es que estamos transitando la ‘normalidad’, tenemos más presencialidad que en 2020 pero continuamos con la misma de manera restringida, ya que implica un distanciamiento físico que nos lleva a este esquema de alternancia entre la presencialidad y la no presencialidad», concluyó Trotta.