En el marco de la campaña masiva de vacunación contra el Coronavirus, un enfermero y la jefa de Vacunación del Hospital San Roque, en la localidad de Esquina, provincia de Corrientes, fueron detenidos tras constatarse que sustraían dosis del centro de salud para luego comercializarlas. También se detuvo a una tercera persona que había adquirido ilegalmente las vacunas, pero que luego fue liberada.
Según trascendió, se estableció un plazo de 10 días de prisión preventiva para ambos profesionales de la salud. El director del Hospital fue quien radicó la denuncia y, de acuerdo a la investigación, las dosis habían sido comercializadas a un valor entre los $8.000 y los $9.000.