El presidente del Directorio de la Administración de Parques Nacionales, Lautaro Erratchú, indicó que la situación de incendios forestales que afectaron diversas áreas protegidas desde el inicio del verano es “consecuencia del cambio climático y las temperaturas que son más elevadas que los promedios históricos, ocasionando importantes sequías en diversas zonas del país”, durante una nueva recorrida por las zonas afectadas por los incendios.
En ese sentido, Erratchú destacó algunos ejemplos de esta situación, como fue el caso la semana pasada en el Parque Nacional Río Pilcomayo, en la provincia de Formosa; el Parque Nacional Lihué Calel, en La Pampa; y también en los Parques Nacionales Mburucuyá e Iberá, en Corrientes, que fueron controlados rápidamente en algunos casos y extinguidos totalmente en otros.
Largo aliento
En cuanto al incendio denominado Complejo Lago Martin, en la zona Sur del Parque Nacional Nahuel Huapi, el funcionario informó que “este incendio se encuentra activo y en una etapa de trabajo intenso por parte de los brigadistas, que tienen claro el diagnóstico de que se trata de un combate de largo aliento hasta que se logre extinguirlo”. “Se está trabajando muy fuertemente, y en este momento hay 150 personas trabajando entre brigadistas, personal técnico y personal de apoyo, sumado a seis aviones hidrantes, dos helicópteros con helibaldes, varias motobombas instaladas y camiones autobombas de Parques Nacionales”. Por esa razón, detalló que se está instalando un campamento para 120 personas aproximadamente, en El Manso, con el objetivo que se puedan alojar los brigadistas.
Regularizados
Además, se refirió específicamente a la situación de los combatientes de incendios forestales: “Los brigadistas siempre se habían manejado con una contratación absolutamente precaria. Existen desde hace 32 años y cuando llegamos a la gestión, estaban por fuera de cualquier modalidad contractual y decidimos regularizar esa situación”. En ese sentido, explicó: “es la primera vez que cuentan con una contratación en regla, tienen un convenio colectivo, la posibilidad de tener una carrera y, en unos pocos meses, van a pasar a la planta permanente del organismo”, a lo que sumó que, con ese accionar, “tuvieron una mejora salarial importante. Nos tomamos el trabajo de ver uno por uno, y no hay ninguno que en el pase al convenio colectivo haya perdido dinero”. “Se categorizó y reencasilló conforme a la función que efectivamente venían realizando”, expuso.
Asimismo, remarcó que también se trabaja en la situación de los guardaparques nacionales: “Estamos discutiendo un convenio colectivo para ellos, que también vienen con un régimen que era de 1987”. Esta gestión siempre va a tratar de que sus trabajadores estén en las mejores condiciones posibles”, concluyó.
