La investigación sobre la muerte de Diego Maradona avanza y el expediente es cada vez más grueso, conforme se consiguen nuevos documentos, testigos e imputados. Uno de los enfermeros implicados en la causa por homicidio culposo, Ricardo Almirón, aportó reveladores chats de un grupo de WhatsApp en el que todos los profesionales que atendían al Diez en la internación domiciliaria en Tigre se “pasaban la posta” e informaban sobre su estado a diario.
El grupo de WhatsApp lleva el nombre de “Tigre” y está transcripto en 12 fojas a la que tuvo acceso Télam. Fue creado para que los enfermeros de la empresa “Medidom” que estaban a cargo de Diego, reportaran a sus superiores y a los médicos coordinadores de la prepaga Swiss Medical, el parte diario y cualquier eventualidad. Los siguientes son algunos de los mensajes. Los únicos que aparecen con nombre completo son los enfermeros imputados, al resto solo se los identifica con nombre de pila y cargo.
De el 13/11/2020: Ricardo Almirón (enfermero): “Diego tiene el pie derecho medio edematizado. Me preguntó si puede haber alguna medicación para desinflamar”. Más tarde apunta: “Recién cenó. Y fue al baño a vomitar. Pregunta si se le podrá dar algún antiemético”.
A esto, responde la Dra. Nancy (coordinadora de Swiss Medical): “Llamen a emergencias para que lo evalúen” y el Dr Pedro (clínico de Swiss Medical) acota: “Para el miembro, que lo mantenga elevado. Respecto de los vómitos, Reliveran gotas pero coincido con Nancy que antes se lo evalúe. ¿Qué comió?”.
La Dra. Nancy responde: “Una bomba lo que comieron” y Almirón detalla: “Comió brócoli con camarones y provenzal. Y Diego no quiere que ingrese ambulancia o que vengan médicos”. El Dr. Pedro agrega: “Dale 10 gotas de Reliverán y que afloje a la comida. Y veamos la posibilidad de que un nutricionista le revise la dieta”.
El 16 de noviembre, Mariano (coordinador de enfermeros), comparte el resumen de la enfermera de la tarde: “Me pidió que me retire: ‘piba, cambiate y andate a tu casa’. Se volvió a acostar, me dijeron que me quede en el coche sentada. Estuve desde las 8:30 a 12:30 que se despertó, le preparé las pastillas y se las llevó su sobrino Joni. Luego estuve afuera”.
Ese sentido, otra enfermera (Dahiana Madrid), relata más ocasiones en que Maradona echa a médicos y enfermeros. “El paciente en el día de hoy (18 de noviembre) se cayó dentro de su habitación. Está estable, se medicó por medio de su sobrino. Está la Doc Agustina Cosachov, a la espera del psicólogo (al que luego también pidió que se retire)”.
En los días posteriores se consigna que Maradona no quiere comer, no deja que le tomen los signos vitales y continúa echando a todos de su habitación; incluso no quiso estar con sus hijas.
El día de su muerte (el 25), Almirón indica a las 8 de la mañana que “continúa descansando en buena forma. Se rehusó a ingesta de sólidos, buena entrada de líquidos” pero a las 12.42 la Dra. Nancy arremete: “Por favor novedades del domicilio. Está yendo un móvil en código rojo”.
Maradona había tenido un infarto.