A lo largo de las 10 temporadas que estuvo Friends” class=”com-link” data-reactroot>Friends al aire, hubo una seguidilla de grandes estrellas que pasaron por el Central Perk. Algunas de las más destacadas fueron Julia Roberts, Brooke Shields, Chris Isaac y Van Damme, quienes fueron elegidos estratégicamente para estar en el episodio emitido el 28 de enero de 1996, después del Super Bowl. En ese entonces muy poco se supo de la participación de los famosos artistas, pero en los últimos días salieron a la luz unas declaraciones del director y productor ejecutivo de la serie que dejan muy mal parado al belga.
Durante la transmisión de El día después del Super Bowl, el episodio de la segunda temporada que se cree fue el más visto de la historia, cuya audiencia alcanzó los 52,9 millones de espectadores, Van Damme hizo su aparición estelar, pero no causó una buena impresión entre las estrellas de la ficción con quien tuvo que hacer las grabaciones. Fue acusado de “arrogante” y “acosador”.
En una entrevista brindada por el director de la famosa serie, Michael Lembeck, a The Hollywood Reporter (THR), dijo que el belga fue bastante difícil de manejar en el set y lo describió como uno de los cameos más problemáticos de la historia del programa. Según explicó, el actor “no estaba preparado” y “no era profesional”.
El realizador también contó que tanto Jennifer Aniston (Rachel) y Courteney Cox (Mónica) se sintieron de lo más “incómodas” mientras hacían las grabaciones y se quejaron con él por una situación de acoso.
De acuerdo con Lembeck, en una de las escenas que no fueron emitidas, el entonces considerado sex symbol tuvo que besar a Rachel y a Mónica, pero que la secuencia de las imágenes fueron difíciles de sacar ya que las actrices se quejaron por el uso excesivo de la lengua del actor. “No estaba preparado y era arrogante. Primero lo grabamos a él y a Jennifer. Después ella se acercó a mí y me dijo: ‘¿Podrías hacerme un favor y pedirle que no meta su lengua en mi boca cuando me esté besando?’. Le dije a él que todo había ido bien, pero que era un plano muy corto y que por favor no hiciera eso”, explicó.
Para sorpresa del director, en una segunda secuencia, Mónica, con quien también tuvo que hacer una escena similar, llegó a su oficina con la misma queja: “Luego filmamos una escena con Courteney, pero viene hacia mí y me dice: ‘¿Podrías decirle que no meta su lengua en mi boca?’. ¡No lo podía creer! Tuve que decírselo de nuevo, pero un poco más firme”, agregó Lembeck.
Si bien ninguna de las actrices salió a emitir ningún comentario sobre esta situación, Kevin Bright, productor ejecutivo de la serie, contó que fue “un suplicio” trabajar con Van Damme. “Llegó al set tres o cuatro horas tarde y se dirigió directamente a su trailer. Así que David (Crane, co creador de la serie) y yo pensamos en presentarnos y preguntarle si tenía alguna pregunta. Nos acercamos y él dice: ‘No, primero memorizo líneas’”, deslizó en el mismo informe de THR.
El director de la icónica serie también reveló que el actor hizo una lista de exigencias que tenían que estar antes de que llegara al set de grabación. Según relató quería que hubiese una marca puntual de cereales, que un asistente de producción debió conseguir.
LA NACION