Cada vez es más común que la televisión argentina incorpore en su grilla novelas de origen extranjero. Uno de los últimos estrenos en Telefe fue “Doctor Milagro”, una ficción turca que cuenta la historia de Ali Vefa, un residente que sufre del “Síndrome del Sabio” e intenta conseguir su lugar en el área de pediatría de un hospital.
Interpretado por Taner Ölmeb, el esfuerzo que hace el médico para integrarse sumado a sus destacada inteligencia y capacidad es uno de los condimentos que hace que la historia sea cautivante y logre estar entre lo más visto de la noche.
“El Síndrome del Sabio”, también conocido como el “Síndrome de Savant”, es una patología que se encuadra dentro del espectro autista. Según investigaciones del psiquiatra Darold Treffert, se trata de un estado patológico según el cual algunas personas con desórdenes mentales, y pese a alguna discapacidad física, motriz o mental, poseen destacadas habilidades específicas.
Quiere decir que una persona sufre de alguna alteración mental, pero demuestra y desarrolla una capacidad extraordinaria sobre algún tema o campo específico de conocimiento y destreza. En la ficción, que alcanza picos de 20 puntos de rating, su protagonista debe lidiar con sus dificultades para comunicarse y los obstáculos que le ponen sus colegas ya que quedan obnubilados por su brillantez en la medicina.
De todas formas, según los expertos no todos los “savants” son autistas ni son personas que necesariamente nazcan con esta condición. Este síndrome también se ve reflejado en ficciones como “The Good Doctor”, la versión original de “Doctor Milagro”, y la película documental “Kim Peek“, inspirada en la historia real de un hombre con la patología.